Cada vez más personas eligen volver a lo natural desde sus hogares. No hace falta tener una gran parcela para disfrutar de una huerta: con un pequeño balcón, una terraza o incluso una ventana luminosa, podés generar un rincón verde lleno de vida y sabor.
La jardinería urbana busca eso: reconectarnos con la naturaleza desde donde estemos, transformando lo cotidiano en una experiencia sostenible.
1. Elegí el lugar adecuado
Buscá un espacio con buena luz natural. La mayoría de las plantas necesitan entre 4 y 6 horas de sol al día. Si el sol directo es intenso, podés colocar media sombra o ubicar las macetas en diferentes alturas.
2. Usá macetas o recipientes reciclados
Podés reutilizar frascos, baldes, cajones de madera o macetas antiguas. Lo importante es que tengan buen drenaje. En huertas urbanas, cada recipiente cuenta.
3. Optá por un sustrato vivo y equilibrado
El secreto de una huerta sana no está solo en la planta, sino en el suelo. Elegí sustratos ricos en materia orgánica, aireados y con buena retención de humedad.
4. Empezá con especies fáciles
Si estás dando tus primeros pasos, elegí plantas que se adapten bien al contenedor: rúcula, lechuga, perejil, albahaca, menta o tomates cherry.
1. Incorporá bokashi: fertilizante natural y limpio
El bokashi transforma tus restos de cocina en abono lleno de nutrientes y microorganismos beneficiosos.
Podés usar el tarro de Bokashi Urganic, ideal para espacios pequeños, sin olores ni complicaciones.
Aplicalo cada 15 días como fertilizante líquido o enterrando el material sólido en tus macetas o bancales.
Beneficios:
Enriquecé el suelo con vida microbiana activa.
Reducí tus residuos domésticos.
Alimentá tus plantas con nutrientes naturales y equilibrados.
2. Sumá biocarbón para retener agua y nutrientes
El biocarbón es un carbón vegetal activado que mejora la estructura del suelo. Ayuda a retener humedad, airear la tierra y conservar nutrientes por más tiempo.
Cómo usarlo:
Mezclá entre un 10 y 20% del volumen total de tu sustrato.
Si lo combinás con compost o bokashi, potenciás su efecto.
Beneficios:
Aumenta la capacidad del suelo para retener agua.
Favorece raíces más fuertes.
Disminuye la frecuencia de riego.
3. Activá la microvida con MEN (Microorganismos Eficientes Naturales)
Los MEN son aliados invisibles que ayudan a regenerar el suelo, fortalecer las plantas y prevenir enfermedades. Actúan equilibrando la microbiología del sustrato y mejorando la absorción de nutrientes.
Cómo aplicarlos:
Diluilos en agua según indicaciones del envase.
Usalos para regar tus macetas o pulverizá sobre hojas y tierra.
Beneficios:
Estimulan el crecimiento de las raíces.
Favorecen la floración y la fructificación.
Refuerzan las defensas naturales de las plantas.
Colocá tus plantas más altas o de mayor necesidad lumínica en los sectores más soleados.
Regá temprano en la mañana o al atardecer para evitar evaporación.
Alterná cultivos: combiná aromáticas, hortalizas y flores para mantener equilibrio natural.
Renová el sustrato una o dos veces al año, agregando materia orgánica, biocarbón o bokashi.
Evitá fertilizantes químicos: dañan la vida del suelo y reducen la calidad de las cosechas.
En Peppo podés encontrar todo lo que necesitás para empezar tu huerta urbana de manera natural:
Bokashi Urganic,
Biocarbón activado,
y los MEN (microorganismos naturales) para regenerar el suelo y mantenerlo lleno de vida.
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El sol no es enemigo ni aliado automático. Es energía intensa. Aprender a leer cómo reaccionan las plantas al calor cambia por completo la forma de cuidarlas, y también nuestra manera de intervenir.
El calor no es un enemigo. Es un cambio de ritmo. Acompañarlo con conciencia puede marcar la diferencia en tus plantas… y en vos.